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| Los líderes cristianos estamos llamados a preocuparnos, en primer lugar, de nuestra familia, que es el principal ministerio que el Señor nos ha delegado. |
Muchos líderes cristianos han descuidado a su familia. ¿Es lo mismo que está ocurriendo en su vida? Es tiempo de aplicar correctivos, con ayuda del Señor."
Por Fernando Alexis
Jiménez | @OraciondePoder
Por estos días estoy acompañando la estructuración del Curso Liderazgo Familiar que
compartiremos con los estudiantes del INSTITUTO BÍBLICO MINISTERIAL.
La base es un libro electrónico sobre cimentación
familiar que escribí hace algún tiempo, y que publiqué en el Portal
cristiano Mensajero de la
Palabra.
Ha sido una experiencia maravillosa y gratificante, aunque
invierto varias horas desde que comienza la mañana hasta bien entrada la noche.
Me ha llevado a recordar el enorme compromiso que tiene el
líder cristiano con su familia.
Pablo dice en su carta a los tesalonicenses:
"...que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción
con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará
de la iglesia de Dios?) ..." (1 Timoteo 3:4, 5| RV 60)
Y también leemos:
"Los diáconos sean maridos
de una sola mujer, y que gobiernen bien sus hijos y sus casas."(1 Timoteo
3:12 | RV 60)
Pienso que nos hemos enfocado más en cómo servir a Dios y,
aún, en pararnos frente a un púlpito, antes que en ejercer mayordomía en el
primer ministerio que el Señor nos delegó y que está representado en nuestro
cónyuge e hijos.
UNA TRISTE REALIDAD
Hay pastores, obreros y líderes que son ampliamente
reconocidos, pero su entorno familiar es un caos. Gravísimo. Es hora de cambiar el curso de la historia,
con ayuda de Dios.
Tremenda responsabilidad la que nos asiste. Cuando esté frente
al Padre, quizá no me preguntará cuántos mensajes compartí o los artículos que
publiqué.
Probablemente me dirá: “¿Cómo
cuidaste a Lucero, tu esposa, o a tus hijos Johana, Fernando Jr. o Mauricio, el
menor?” Será inapelable. No podré eludir la respuesta.
Pero le tengo buenas noticias. No solo seré yo, sino también
usted. En el INSTITUTO
BÍBLICO MINISTERIAL estamos convencidos de que quien desea servir a
Jesucristo, debe primero demostrar que es un excelente líder con su familia:
tolerante, comprensivo, amoroso y que brinda apoyo.
Reconozco que después de muchos años de pastorado—ya hasta me
olvidé cuántos--, apenas estoy viviendo el proceso de transformación familiar.
Y a pesar de que tenía tan descuidado mi
familia, mi esposa y mis hijos han sido
generosos y me han brindado la oportunidad.
Y en su caso, ¿cómo andan las cosas?
© Fernando Alexis Jiménez es Director del Portal cristiano www.mensajerodelapalabra.com
#FernandoAlexisJiménez| #MensajerodelaPalabraCom|#Reflexiones
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