El anuncio de la librería en crisis, me hizo recordar --una vez más--que todo terminará en cualquier momento, y que todos debemos estar preparados. |
Hace algunos años en un sueño, me encontraba feliz de camino a casa. Sin embargo, en el mejor momento del viaje, alguien se sentó a mi lado. Sin que me lo dijera, supe que era el Señor Jesús. Alguien normal, vestido de paisano."
Por Fernando
Alexis Jiménez| Editor de EBR
El terremoto y los movimientos
sucesivos que dejaron reducidos a escombros, edificios y casas, acabaron
igualmente con las librerías de la colonia Roma, en pleno centro de México. Un
lugar para intelectuales, donde se conseguían textos a buen precio y se podían
atesorar recuerdos agradables y en colores, aquellos que no plasman las cámaras
modernas de los teléfonos celulares. De las estanterías de volúmenes de libros,
hoy queda un cúmulo de escombros.
Lo que más me impactaron fueron los letreros que leí. Los difundieron
las redes sociales. Aparecen en la entrada de los negocios:
“Todos los libros que encuentre en el suelo, están con un 50% de
descuento”, o también: “Si le gusta
un libro y no tiene todo el dinero para comprarlo, denos lo que pueda”.
Conmovedor, pero real. Nos
aterriza. Nos lleva a pesar que nada es para siempre. Que los bienes materiales
son efímeros. Que en cuestión de segundos todo puede derrumbarse, como un
castillo de naipes.
El rey Salomón lo expresó con
sencillas palabras hace ya muchos siglos:
“«Vanidad de vanidades —dijo el Predicador—; vanidad de vanidades, todo es vanidad.» ¿Qué provecho obtiene el hombre de todo el trabajo con que se afana debajo del sol? Generación va y generación viene, pero la tierra siempre permanece. Sale el sol y se pone el sol, y se apresura a volver al lugar de donde se levanta. El viento sopla hacia el sur, luego gira hacia el norte; y girando sin cesar, de nuevo vuelve el viento a sus giros. Todos los ríos van al mar, pero el mar no se llena. Al lugar de donde los ríos vinieron, allí vuelven para correr de nuevo. Todas las cosas son fatigosas, más de lo que el hombre puede expresar. Nunca se sacia el ojo de ver ni el oído de oír. ¿Qué es lo que fue? Lo mismo que será. ¿Qué es lo que ha sido hecho? Lo mismo que se hará, pues nada hay nuevo debajo del sol. ¿Acaso hay algo de que se pueda decir: «He aquí esto es nuevo»? Ya aconteció en los siglos que nos han precedido. No queda memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que ha de suceder quedará memoria en los que vengan después.”(Eclesiastés 1:2-11)
Jamás olvide que nada es para
siempre. Todo tiene un final.
DEBEMOS ESTAR PREPARADOS. Debemos estar preparados para que llegue el
final. Preparados para dar cuenta a Dios por nuestros hechos (Eclesiastés 12:14;
Romanos 14:12). Preparados para que Jesús venga por nosotros, en cualquier
momento (1 Corintios 15:52). Preparados para responder ante el tribunal de
Cristo (2 Corintios 5:10)
PREPARADOS PARA EMPRENDER EL VIAJE.
Hace algunos años en un sueño, me encontraba feliz de camino a casa. Sin
embargo, en el mejor momento del viaje, alguien se sentó a mi lado. Sin que me
lo dijera, supe que era el Señor Jesús. Alguien normal, vestido de paisano.
--Vengo a notificarte que vamos a viajar donde el Padre celestial--,
me dijo con suavidad.
--Pero Señor Jesús, no estoy preparado. Deseo ser mejor esposo, mejor
padre, mejor hijo.--, repliqué.
--Ya no hay tiempo; es hora de irnos. Mira, allí está la maleta--,
dijo señalando a un lado. Y, en efecto, estaba lista.
Sentí un profundo dolor, pero
entendí el mensaje. Desperté súbitamente en la fría noche, le di un abrazo a mi
esposa, y me fijé desde ese día, la meta de emprender un cambio radical y permanente con mi familia.
Le invito a reflexionar en que
todo es pasajero, y que debe estar dispuesto a emprender el viaje sin retorno
en cualquier momento. No se apegue a nada, solamente a Jesucristo. Y si no lo
ha recibido en su corazón, hoy es el día para que tome esa que será la mejor
decisión de su vida.
© Fernando Alexis Jiménez es
Director del Portal cristiano www.MensajerodelaPalabra.Com
y, junto con su esposa Lucero, son pastores en la Misión Edificando Familias
Sólidas, en Cali www.FamiliasSolidas.Com
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