Debemos depositar toda nuestra confianza en Dios. Para hacerlo, es esencial que tengamos en cuenta que Él cumple sus promesas. |
Si un distintivo debe evidenciar quien se llama cristiano, es su plena confianza en Dios. Aun cuando no sabemos cómo ni cuándo lo hará, sabemos que Él responderá con poder y cumplirá sus promesas."
Por Fernando Alexis Jiménez| Editor de EBR
No lo sabía nadie,
excepto su esposa Lucía. No había nada en la alacena, llevaba tres semanas sin
empleo y las posibilidades de conseguir un trabajo, eran mínimas. En todas
partes le habían cerrado las puertas. Cuando llevaba su hoja de vida, le
decían: “No tenemos vacancias.”, o sencillamente:
“Deje su currículo. Le llamaremos después.”
--No hay caso,
mujer. Hoy tendremos que aguantar hambre. Lo siento por nuestros hijitos.
Ella lo miró y se
limitó a repetir los versículos que había escuchado el fin de semana en el
culto:
“Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará.” (Salmo 23: 1, 2. Versión Reina Valera)
Aún no
había llegado el mediodía, cuando un miembro
de la congregación trajo una abundante remesa. Al menos, para una semana. “Sentí en mi corazón que podrían necesitar
estos alimentos”, les dijo. Ellos reconocieron que la mano de Dios estaba
en el asunto. No podían explicarlo de otra manera.
Para
terminar, permítame resaltar que Luis Alberto recibió una llamada inesperada.
Alguien al otro lado de la línea telefónica que anunciaba que requerían sus
servicios desde el día siguiente. ¡Dios cumple sus promesas! Desde hoy,
comience a confiar en Él. Deje de lado toda sombra de duda. Simplemente confíe.
©
Fernando Alexis Jiménez es Director del Portal cristiano
MensajerodelaPalabra.Com y, junto con su esposa Lucero, son pastores en la Misión Edificando Familias Sólidas en Cali, Colombia.
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