Puertas abiertas al ocultismo, consecuencias inevitables
Debemos prestar especial atención a los vídeo juegos que frecuentan nuestros hijos. Pueden ser puerta de entrada a las tinieblas. |
Satanás ha desplegado muchas estrategias, sutiles y habilidosas, para atar la mente y la voluntad de las personas."
Por Fernando Alexis Jiménez
Desde la creación de la primera
maquinita de juegos, en 1971, y que se le atribuye a Nolan Bushnell y Ted Dabney, la industria ha pasado de
la pantalla elemental a dispositivos electrónicos sofisticados y aplicaciones a
las que nuestros hijos tienen acceso en el teléfono celular. Las ventas anuales
sobrepasan los 100 billones de unidades.
Hasta allí,
comprensible el asunto. Lo verdaderamente complejo son los contenidos de los
vídeo juegos. Además de violentos, muchos de ellos han introducido en las
mentes de niños, adolescentes y jóvenes la idea de que los demonios existen y que
son algo natural, salvo por supuesto que los hay buenos y malos. Tremenda
mentira de satanás.
Si pretender ser
fanáticos, son una puerta de entrada al ocultismo. Ahora súmele otros portales
de entrada como la consulta del horóscopo, del tarot, la participación en cursos
de meditación, de yoga, la hipnosis, la adivinación y el enorme listado de
servicios que ofrecen los ocultistas a través de los diarios y la Internet.
Puertas a las ataduras de mente y cuerpo
Satanás ha desplegado
muchas estrategias, sutiles y habilidosas, para atar la mente y la voluntad de
las personas.
Hay, por supuesto,
otras formas como entran los demonios: los hechos traumáticos desde la
infancia, el abuso sexual infantil, la pornografía, las prácticas de inmoralidad
como el homosexualismo, la fornicación y el adulterio.
Y rodeando todo lo
anterior, un asunto esencial: el pecado es el que abre espacio para que satanás
tome control. El apóstol Pablo lo advirtió:
“¿No sabéis que si
os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a
quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para
justicia?”(Romanos 6.16)
Si el enemigo
espiritual logra someter su vida, podrá llevarlo a obrar como él quiere. Y
tocar la fibra más sensible de su ser, aquella que le inclina al pecado, es una
de sus mejores estrategias.
Las tres razones del enemigo
El enemigo espiritual
busca que nos mantengamos al margen de todo cuanto está haciendo, al menos por tres
razones:
1. Para mantener atada nuestra mente (2 Corintios 4:3, 4)
2. Para que caigamos en la inmoralidad que nos ata, sin remordimientos de
conciencia (1 Corintios 6:16-18)
3. Para que no utilicemos poderosas armas en su contra, como es la oración
(2 Corintios 10:3-5)
Dios rompe las cadenas
Si algo sabe satanás,
es venderles a las personas la idea de que una vez atrapados, no podrán salir
de la red. Es una tremenda mentira.
Cuando vamos a las
Escrituras encontramos una verdad eterna: Dios nos hace libres. Rompe las
ataduras en la mente, a través de las cuales satanás quiere ejercer influencia
en nuestra voluntad.
“Tú guardarás en
completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha
confiado.”(Isaías 26:3)
No hay cadena que no
pueda romper la sangre de Jesús, vertida en la cruz. Tampoco hay puerta que se
haya abierto al ocultismo, que no se pueda cerrar.
Es ahora, hoy, cuando
debe hacerlo. Basta que ore al Señor Jesucristo, lo reconozca como su Señor y
salvador, y en Su Nombre, renuncie a toda atadura o puerta abierta al mundo de
las tinieblas. Hágalo. Comprobará la diferencia en su vida personal y
espiritual.
© Fernando Alexis
Jiménez es Director del Portal cristiano www.MensajerodelaPalabra.Com